30 de octubre de 2015
La Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH) condenó el asesinato de Diana Sacayán, defensora de los derechos
humanos de las personas trans en Argentina, quien fue hallada sin vida en su
apartamento el 13 de octubre de 2015.
Sacayán jugó un papel esencial en la promulgación, el mes
pasado, en Argentina, de una ley que establece que debe asignarse una cuota
mínima de al menos un uno por ciento en los empleos del sector público en la
provincia de Buenos Aires, a personas trans, siempre y cuando reúnan las
condiciones de idoneidad para el cargo, como antecedentes laborales y
educativos. También tuvo un rol fundamental en la adopción de un protocolo por
el Ministerio de Salud para el tratamiento adecuado de las personas trans en
hospitales en la provincia de Buenos Aires. Ella era referente del Movimiento
Antidiscriminatorio de Liberación (MAL) y representante de la Asociación
Internacional de Gays y Lesbianas (ILGA, por sus siglas en inglés). También
formaba parte del equipo del Programa de Diversidad Sexual del Instituto
Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) en
Argentina. Además, Sacayán participó
como experta en derechos humanos en una reunión sobre empleo y derechos humanos
de personas lesbianas, gay, bisexuales, trans e intersex (LGBTI), organizada
por la CIDH en octubre de 2012 en Barbados.
La CIDH reconoció la labor del gobierno de Argentina en la
promoción de los derechos de las personas trans, especialmente a través de
medidas legislativas, tal como la ley de identidad de género de 2012. Sin embargo, señalaron que según la
información recibida, se trata del tercer asesinato de una mujer trans en
Argentina en el mes pasado. La CIDH instó
al Estado a que se adopten medidas integrales para abordar las causas de fondo
que subyacen en la violencia contra personas trans (travestis, transexuales y
transgénero) en Argentina, tal como la discriminación general que enfrentan
dentro de sus familias, comunidades, escuelas y en los sectores de empleo y
salud.
La CIDH instó a Argentina a seguir pautas de investigación
que tomen en cuenta si el asesinato de Diana Sacayán está relacionado con su
trabajo de defensa de los derechos humanos de las personas trans, y/o si fue
cometido debido a su identidad de género. Expresó que el Estado debe iniciar
una investigación exhaustiva que tendrá que realizarse con la debida
diligencia, juzgar y sancionar a las personas que resulten responsables.
Los ataques cometidos contra defensores y defensoras de los
derechos humanos y líderes de organizaciones de personas trans y lesbianas, gay
y bisexuales tienen el efecto de intimidarlos y de intimidar a las personas
LGBTI en general. Por esta razón también instaron al Estado de Argentina a adoptar todas las
medidas necesarias para garantizar el derecho a la vida, la integridad física y
la seguridad de las y los defensores de los derechos humanos, incluidos
aquellos que trabajan en temas relacionados con la discriminación basada en la
orientación sexual o la identidad o expresión de género.
Diana Sacayán, ícono de la militancia trans en el país. |
Diana Sacayán y Cristina Fernández, Presidenta de Argentina. |